Propiedades nutricionales de los níscalos. Es un hongo de color anaranjado que crece en los bosques de pinos o mixtos, ya que necesita un árbol para desarrollarse. Aparece en los meses de otoño y su sombrero mide entre 4 y 16 centímetros. Crece en cualquier tipo de suelo aunque no le gustan demasiado los terrenos con exceso de agua; cuando se corta, segrega una leche de color anaranjado, de ahí que también se denomine rovellón, que en catalán significa “oxidado”.
Los níscalos o rovellones poseen un olor suave y dulce y su carne es compacta y densa. Su consumo es muy recomendable, ya que aportan muchos minerales, como el yodo, calcio, potasio, fósforo, hierro, magnesio y sodio y vitaminas, como la A y del grupo B: B1, B2, B3 y B5 y cuantan con un número muy bajo de calorías, por lo que su consumo es beneficioso en dietas de control de peso.
Del consumo de los níscalos se obtienen muchos beneficios, especialmente indicados para mantener el sistema inmunológico en buenas condiciones, ya que ayudan a subir las defensas y favorecen la formación de anticuerpos y la producción de glóbulos rojos y blancos. Combaten el estreñimiento, ya que activan el tránsito intestinal y son de gran ayuda para el estrés y las migrañas. Son ideales para controlar el colesterol y su consumo está recomendado para niños y embarazadas.
Cuentan con una gran versatilidad en la cocina, aunque se deben de conservar en la nevera y limpiar muy bien y con mucho cuidado, para estar seguros de que no contengan parásitos.